
"Baudelaire escribi� un d�a, a prop�sito de los comentarios mal�volos que siguieron a los fallecimientos de Thomas de Quincey y de Poe: "El campo mortuorio de la literatura es menos respetado que el cementerio com�n, donde un reglamento de polic�a protege las tumbas contra los ultrajes inocentes de los animales". No me repugna menos que a �l la manera de c�mo, sin derecho, y a veces sin real necesidad, la vida �ntima de cualquiera que ha contado en las artes es asimilada a un muro p�blico donde cada uno traza sus comentarios, como si la envidia instintiva de las masas por los seres c�lebres no estuviera ya demasiado inclinada a rebajarla".
("Vida Amorosa de Charles Baudelaire" de Camile ����Mauclair. Prefacio del autor. Ed. Wunderkammer)
���� Y otra cita del mismo libro...
"Pueden contarse las peripecias amorosas de la existencia de un hombre que no es m�s que un hombre; pero un escritor no es un hombre como los dem�s. Es un ser doble - un hombre en el que vive un escritor, el cual habla en nombre de los dos, y es en su literatura donde hay que buscar sus respuestas a la mayor parte de sus enigmas personales".
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