La concepción del matrimonio como un compromiso para toda la vida o “hasta que la muerte nos separe” ha cambiado significativamente con el paso de los años. Los cambios culturales y sociales durante las últimas décadas han ayudado a redefinir el matrimonio. Al mismo tiempo, estas creencias también han normalizado y eliminado en gran medida el estigma entorno al divorcio. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un total de 77.200 parejas se divorciaron en España en el año 2020. Si se suman los casos de nulidad y separación, el número de parejas casadas que rompieron se eleva hasta las 80.015. De hecho, los datos señalan que se producen casi siete rupturas por cada diez matrimonios, situando a España como uno de los países con mayor tasa de divorcio de la Unión Europea (UE).
El divorcio es una realidad siempre constante en la sociedad actual. Gracias a la Ley 15/2015 de jurisdicción voluntaria, que introdujo el procedimiento del divorcio express en nuestro ordenamiento jurídico, los cónyuges pueden disolver su matrimonio de una forma rápida, sencilla, y económica, siempre y cuando ambos tengan la voluntad de divorciarse. Como señala Digilex, la plataforma de divorcio express online más usada en España, el único requisito para acogerse a este procedimiento es que los cónyuges lleven, al menos, tres meses casados. Además, la documentación necesaria para iniciar el trámite es básica: el certificado literal de matrimonio, el certificado de nacimiento de los hijos, si los hubiere, y el certificado de empadronamiento, si bien no siempre se solicita.
Hoy en día, el divorcio express online es la fórmula más utilizada por las parejas que quieren disolver su matrimonio en España. Esto se debe principalmente a la sencillez y a la rapidez del proceso, especialmente si lo comparamos con los divorcios contenciosos. A diferencia del divorcio contencioso, que puede llevar entre 8 y 18 meses para ser resuelto, la sentencia del divorcio express suele dictarse en el plazo de 1 o 2 meses. Además, el procedimiento es más económico, ya que suele costar entre 135 y 160 euros por cónyuge, aunque el precio final puede variar dependiendo del caso. De esta forma, una vez que se solicita, el divorcio puede resolverse en cuestión de meses y con un coste económico y emocional mucho más bajo que cuando se inicia un procedimiento contencioso.
¿Cuáles son las causas más comunes de divorcio en España?
El ‘IV Observatorio del derecho de familia’ de la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA) aborda, entre otras cuestiones, los motivos más comunes por los cuales las parejas españolas deciden divorciarse. Según el informe estas son algunas de las principales causas de divorcio en nuestro país:
- El desgaste, alejamiento y la falta de comunicación al que lleva el estrés provocado por la crianza de los hijos y el trabajo. La comunicación lo es todo en un matrimonio. Cuando los cónyuges son incapaces de hablar de una manera positiva y eficiente que beneficie a la relación, entonces el matrimonio puede verse afectado. Un problema que se acrecienta por el estrés causado por la educación de los hijos y el trabajo.
- Desenamoramiento. La falta de deseo sexual, las diferencias graves en temas importantes, los cambios en los intereses o el conflicto excesivo son algunas de las variables que pueden provocar el desenamoramiento.
- Infidelidades. Las aventuras extramatrimoniales son una de las principales razones por las cuales las personas se divorcian. La infidelidad rompe la confianza en la relación. Una vez perdida la confianza es difícil de reconstruir.
- Dificultades económicas. Los problemas de dinero, que suelen surgir del manejo imprudente por parte de uno de los cónyuges, pesan mucho sobre un matrimonio, ya que causan una tensión excesiva y sostenida. El estrés que generan las dificultades económicas suele impregnar todos los aspectos de la vida diaria. Y como dice el refrán, “cuando el dinero sale por la puerta, el amor salta por la ventana”.
- Discrepancias que surgen a raíz de la crianza y de la educación de los hijos. Las discrepancias en los que respecta a las pautas de crianza y educación de los hijos suponen uno de los mayores retos a los que se somete un matrimonio. Aunque ambos cónyuges siempre quieren lo mejor para sus hijos, pueden tener formas de pensar diferentes, lo que provoca discusiones constantes en cualquier tema relacionado con la crianza y la educación.
- La excesiva presencia de las respectivas familias políticas. Las familias juegan un papel clave. Sin embargo, la excesiva presencia de las respectivas familias políticas puede ahogar al matrimonio, especialmente cuando uno de los miembros de la pareja tiene excesiva dependencia de su familia, algo que ocurre a menudo en las parejas jóvenes. Cualquier pareja necesita independencia para crear su propio hogar, y la presencia de las familias políticas puede interferir negativamente en el transcurso diario de la pareja.
Licenciado en Ciencias Biológicas con más de 30 años de experiencia en educación como docente en el Centro de formación ACN y creador de Blogs educativos: educapeques.com, educayaprende.com, escuelaenlanube.com, docenciaparalaformacionenelempleo.es. Actualmente imparto cursos de formación profesional en la Academia de Valdepeñas