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Vladimir Putin llegará a Corea del Norte este martes

Los medios norcoreanos anuncian una visita de dos días del presidente ruso

El presidente ruso, Vladimir Putin, junto al líder norcoreano Kim Jong-un.
El presidente ruso, Vladimir Putin, junto al líder norcoreano Kim Jong-un.MIKHAIL METZELAFP
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Corea del Norte mantiene el habitual cerrojo informativo, pero las imágenes satelitales no suelen engañar: la Plaza de Kim Il-sung, en el centro de Pyongyang, se está preparando para celebrar una gran fiesta. Como ocurre en cada desfile militar o en los grandilocuentes discursos del omnipresente líder Kim Jong-un, se ha levantado un escenario para la orquesta, un podio para los dirigentes y demás estructuras propias de celebraciones. Algo que acabaron confirmando hoy los medios norcoreanos, que han anunciado que el presidente ruso realizará una visita de dos días, la cual empezará mañana martes.

Esto es lo que han captado los satélites de la empresa privada estadounidense Planet Labs. A falta de algún evento importante marcado en estas fechas en el calendario norcoreano, tanto los analistas de la vecina Corea del Sur, como desde la inteligencia estadounidense, creen que la alfombra roja sólo se puede estar desplegando en Pyongyang para una cosa: la esperada visita de Vladimir Putin.

Todo apunta a que el presidente ruso pisará pronto -"En los próximos días", aseguran desde Seúl- la capital de Corea del Norte. Sería su primer paseo por Pyongyang desde el año 2000. Un viaje que se realizará bajo el escrutinio internacional por las preocupaciones de que el régimen de Kim se disponga a rearmar a Moscú con más munición y tecnología armamentista avanzada para su guerra en Ucrania.

Desde Corea del Sur subrayan que el Norte ya ha enviado hasta tres millones de proyectiles de artillería a Rusia para utilizarlos contra Kiev, donde también han asegurado que el ejército ruso ha utilizado misiles norcoreanos contra sus soldados. No es ningún secreto que Putin lleva tiempo cortejando a Kim en busca de armas para alimentar su guerra en Ucrania.

Los funcionarios estadounidenses alegan que Corea del Norte ha enviado por mar y por ferrocarril alrededor de 11.000 contenedores llenos de armas a Rusia desde septiembre, cuando Kim visitó a Putin en Vladivostok. Los envíos incluyen proyectiles de artillería y misiles balísticos clase Hwasong-11.

"Corea del Norte es un invencible camarada de armas de Rusia", manifestó a principios de junio el líder norcoreano en un mensaje a Putin que hizo público la cadena estatal KCNA con motivo del Día Nacional de Rusia. Después de que las conversaciones con Estados Unidos para el desarme nuclear se rompieran tras la fallida cumbre de Hanoi en 2019, desde Pyongyang han apostado por mejorar su programa de misiles y han buscado un acercamiento con Rusia.

Cuando se estableció en 1948 la República Democrática Popular de Corea bajo el mando de Kim Il-sung, abuelo del actual Kim, Moscú fue el principal benefactor de Pyongyang. Pero tras la caída de la URSS, China, en plena ebullición económica, ocupó ese puesto. Corea del Norte, que fue dando pasos hacia un hermetismo cada vez más extremo, se entregó totalmente a la dependencia de Pekín para conseguir alimentos, asistencia médica y combustible.

Pero ahora es Moscú quien está reforzando la vieja alianza con Kim, uno de los pocos líderes mundiales -junto con el de Eritrea, Bielorrusia y Siria- que se opusieron a la resolución de la Asamblea General de la ONU que condenaba el ataque ruso a Kiev. Putin recurre a su aliado en busca de ayuda para reponer su mermado arsenal de armas, mientras que el norcoreano necesita la tecnología rusa para potenciar el desarrollo de los misiles balísticos y su programa nuclear.