Los tabloides británicos lo han bautizado como el Taylorgate, el último capítulo del escándalo de los regalos personales o freebies del Gobierno de Keir Starmer. Según The Sun, el premier y otros altos cargos laboristas (de la ministra de Interior, Yvette Cooper, al alcalde de Londres, Sadiq Khan) pudieron recibir entradas gratis para su concierto en Wembley a cambio de proporcionar a la cantante estadounidense una "escolta motorizada de luz azul" de Scotland Yard, un tratamiento normalmente reservado a altos cargos políticos y a la familia real.
La conservadora Susan Hall, al frente de la comisión de Policía de la Asamblea de Londres, ha reclamado la apertura de una investigación oficial para determinar si ha podido existir un "conflicto de intereses". Un portavoz de Downing Street ha tenido que terciar en la polémica y asegurar que la dotación de una escolta a Taylor Swift fue "una decisión operativa" de Scotland Yard y no del Gobierno.

Keir Starmer toca fondo en la prueba de los 100 días
Según The Sun, la concesión de una escolta oficial con cargo al erario público (un privilegio negado al mismísimo Príncipe Harry cuando visita el Reino Unido) pudo haber sido negociada directamente por la madre de Taylor Swift, Andrea, con la entonces jefa de Personal de Starmer, Sue Gray, que fue destituida de su puesto hace más de una semana.
De acuerdo con el tabloide londinense, la organización del Eras Tour requirió protección policial para Swift después de que sus conciertos en Austria fueran suspendidos por razones de seguridad y ante el temor de un atentado terrorista. El requerimiento fue recibido con reservas por los mandos policiales y forzó incluso la intervención del fiscal general Lord Richard Simon Hermer, que no ha hecho pública recomendación al Gobierno.
Keir Starmer recibió el 20 de agosto cuatro entradas gratis para el concierto, aunque Downing Street ha negado que fueran por "agradecimiento" por haber proporcionado escolta policial a la cantante. La cuantía de las entradas figura entre los 7.000 euros devueltos por el premier a raíz del escándalo de los freebies (se estima que en los cuatro años como líder laborista ha recibido el equivalente a 120.000 euros en regalos de donantes, de sus trajes a las gafas de diseño).
Scotland Yard ha informado entre tanto al decisión de proporcionar "escolta de luz azul" se hace después de una somera evaluación de "la amenaza, los riesgos y las circunstancias en cada caso".