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El jueves trascendió una noticia que casi nadie se esperaba. Dolores de Cospedal (58 años) e Ignacio López del Hierro (77)se han separado después de 15 años de matrimonio. Saltaron las alarmas el pasado 12 de octubre. A los fastos del Día de la Hispanidad en Madrid, asistió una bellísima como siempre ex ministra de Defensa con el PP, pero esta vez iba sola, sin su marido, que suele acompañarla a todo tipo de actos. Cuadraba que López del Hierro se hubiera quedado en casa, hacía mal tiempo y se sabe que aún arrasta secuelas de un Covid terrible que casi le lleva a la muerte. De hecho, el empresario estuvo ingresado a la vez, en la misma clínica y por la misma afección, que los marqueses de Griñón y Cubas, que corrieron peor suerte que él.
Cospedal acudió al desfile militar vestida con un elegante traje de chaqueta beige de pata de gallo XL y un broche joya en la solapa. Su rictus era serio, no es mujer de sonrisa gratuita, y se le encrespó un poco el pelo por la lluvia. Ya en Zarzuela se retocó y se mostró más afable con la prensa, de corrillo en corrillo.
La periodista Paloma Barrientos publicó la exclusiva de la ruptura en Vanitatis pocos días después. Ella tituló en plural, "se separan" e incluyó la confirmación de Cospedal, sin embargo hay voces que apuntan que ha sido ella quien ha tomado la iniciativa. Que si la diferencia de edad, que si tal, que si cual... "Efectivamente, me he separado. No hay ninguna historia más allá de las desavenencias en la convivencia. Me gustaría dejar esto claro. Yo sigo trabajando, y mucho", zanjó la ex secretaria general del PP a Barrientos cuando le confirmó la noticia. Adía de hoy, Cospedal es socia del despacho CMS-Albiñana y Suárez de Lezo y desempeña cargos en varias instituciones, como el Instituto Elcano y el Colegio de Abogados.
Especulaciones aparte, este divorcio en curso se trata de una sorpresa para su entorno. "Me extraña mucho que se hayan separado", nos dice una persona que conoce muy bien al matrimonio. "Se casaron por razones no estrictamente románticas, y las parejas que lo hacen así suelen durar toda la vida. Dolores e Ignacio han compartido amor y objetivo político. Un proyecto común que se truncó hace seis años, así que no puede ser un efecto retardado... Juntos han atravesado épocas turbulentas, tanto en el partido como en los tribunales. Han resistido hasta la Operación Kitchen, la dimisión de ella por los audios de Villarejo... ".
proyecto en común
Personas que les han tratado afirman que ambos tenían una gran dependencia el uno del otro y se guardan muchísimos secretos. "Él estaba encantado de estar casado con una diosa. Es un hombre chapado a la antigua... Pero su unidad iba más allá del amor. Compartían vocación política, ella nunca ocultó que él era su mejor asesor, si hasta se lo llevaba a los comités regionales del PP, donde nadie iba acompañado... Ignacio, que fue gobernador civil de Toledo con la UCD y terminó dirigiendo la carrera de su mujer, quería hacer de Dolores la primera presidenta del Gobierno. Quizás porque aquel sueño se acabó y el niño se ha hecho mayor todo ha saltado por los aires".
El libro La reina en la torre de marfil, del periodista Antonio Martín Beaumont, describe muy bien cómo es -fue- la relación entre Cospedal y del Hierro, cuyo entorno afirma a este periódico que "a pesar de lo que pueda parecer, es una separación de mutuo acuerdo, por desgaste tras 20 años de relación". El autor afirma que se conocen desde hace muchos años, que les presentaron unos parientes de Ignacio. Su noviazgo trascendió en 2007, cuando él fue nombrado consejero en la Corporación Industrial de Caja Castilla-La Mancha, lo que dio pie a acusaciones por parte del PSOE de enchufismo. Entonces, sus amigos les describían como "dos almas gemelas por ser personas cultas, con una estética muy semejante, cuidando siempre las formas, y amantes del arte y la historia. Se podría concluir que una no puede vivir sin el otro y, y viceversa".
Vidas anteriores
Cuando se casaron en 2007, López del Hierro, acaudalado sevillano que ha sido consejero de empresas como Iberdrola o Metrovacesa, estaba divorciado de Inés D'Aubarède, con quien tuvo tres hijos, Helena, Ignacio y Rodrigo. Helena dirige hoy el Museo del Traje de Madrid, Ignacio trabaja en Iberia y compite como jinete de salto y Rodrigo es broker inmobiliario en México.
Dolores, por su parte, también estaba divorciada de su compañero de oposición a la abogacía del Estado, José Félix Valdivieso González, con quien estuvo casada cuatro años. Hijo de diplomático y de una potentada familia de la aristocracia canaria, ejerció de periodista, ahora dirige una multinacional y ha publicado un libro de cuentos, Cosas de murciélagos. La "abismal" diferencia de caracteres dinamitó la relación y ella le puso "las maletas en el portal", se lee en su biografía autorizada.
Cospedal "salió atormentada" de aquella relación, afirma otra fuente. Entonces ya había dado el salto político, tenía 31 años y trabajaba con Arenas en Asuntos Sociales. Pidió el traslado a la delegación de su consejería en Washington y allí estuvo un año. A su regreso, arrancó su ascenso progresivo en el partido, y por el camino decidió ser madre soltera de su hijo Ricardo, que después adoptó López del Hierro, y que hoy roza la mayoría de edad.
Su boda
La boda de la pareja, según se lee en crónicas de la época, fue de ensueño. Se celebró en Toledo -ella fue después presidenta de Castilla-La Mancha- . Dolores, "guapa que no quiere ser guapa", lució un vestido de Alma Aguilar delicado, con pedrería, que le sentaba que ni pintado. Asistieron, entre otras personalidades, Rajoy y su esposa Viri y Arias Cañete... Por supuesto no estaba su gran enemiga Soraya Sáenz de Santamaría. No se sirvió carne, hubo un largo aperitivo y tampoco se filtró foto alguna. Vivieron, felices, entre Toledo, un buen piso en el barrio de Salamanca y una finca en Ávila, donde pasaban los fines de semana.
"Cospedal se casó con su padre. En Ignacio encontró un refugio. Un amigo, un amor, un asesor que la construyó políticamente, un hombre bien relacionado con contactos en el PNV, con los empresarios catalanes.... Lanzó su carrera. No creo que le haya dejado por la edad, como Corinna a Juan Carlos, ni por otro hombre, ella no es de impulsos". Un enigma que sólo pueden resolver ellos.