- San Sebastián La Ertzaintza identifica a varios jóvenes como los autores de arrancar del cuello de una joven la bandera de España
Situados en el centro de Varsovia, el 'streamer' lituano, Flightas23, y el 'influencer' latinoamericano, Cbalto123, se encontraban preparando una transmisión en directo para la plataforma 'Kick', cuando fueron interpelados por un hombre que les acusaba de haber cometido un robo y que les advertía de que avisaría a la policía. Ante la situación, el segundo de ellos decidió grabar el encontronazo y, en ese momento, entró en plano el número dos de la Ertzaintza, Alfonso Garaikoetxea, que se encontraba de vacaciones en la zona. "Eres un gilipollas integral. ¿Quieres dejar de grabar?", le dijo en castellano, para luego marcharse junto a su acompañante.
El video, que ha sido publicado por Cbalto123 en Instagram, acumula más de 600.000 reproducciones y ha llegado a dependencias del cuerpo de seguridad vasco. Desde allí, fuentes del Departamento de Seguridad, ahora dirigido por Bingen Zupiria, consultadas por Eldiario.es, indican que, pese a que conocen la existencia del vídeo, prefieren no hacer comentarios sobre el mismo y no aclaran si se ha iniciado alguna actuación interna en relación a estos hechos. Lo único que apuntan es que Garaikoetxea "estaba de vacaciones", dando a entender que su actuación no responde a sus funciones en la Ertzaintza.
Los agentes de la policía vasca tienen un código deontológico que indica que existen unos "deberes", aunque se encuentren fuera de servicio. Además, señala que los ertzainas "deberán actuar en todo momento con integridad y dignidad, evitando todo comportamiento que pueda significar pérdida de la confianza y consideración que requieren sus funciones, o comprometer el prestigio o eficacia del servicio o de la Administración".
Garaikoetxea ostenta desde 2019 el cargo de jefe de la división de Protección Ciudadana, la que más agentes aglutina en la Ertzaintza. Tiene el rango máximo (galones dorados con dos 'eguzkilores' en hombreras y pecho, lo que antes era un "superintendente"), siendo el segundo agente de mayor nivel en cuerpo después del jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda.
Natural de Pamplona, este familiar del primer lehendakari, Carlos Garaikoetxea, ya vió como en 1999 su nombre aparecía en los medios de comunicación al negarse a pasar una prueba de alcoholemia de la Guardia Civil en Navarra.