La presidenta de Confebask Tamara Yagüe ha advertido a una delegación de parlamentarios de EH Bildu encabezada por Pello Otxandiano que las empresas son las "primeras contribuyenes al estado del bienestar" de Euskadi. Un apunte con el que Confebask sigue reivindicando su aportación social en plena resaca del acuerdo fiscal alcanzado por el PNV y el PSE-EE con Elkarrekin Podemos. EH Bildu llegó a ofrecerse como aliado a los dos partidos del gobierno si la "revisión fiscal" propuesta se convertía en una "reforma fiscal" que incluyera cuotas mínimas reales para las grandes empresas y una evalución continua del efecto de las deducciones que se aplican ahora miles de empresas.
"Sin una empresa competitiva, no tendríamos los beneficios sociales y colectivos de los que disfrutamos en la actualidad", ha trasladado Confebask a los parlamentarios Pello Otxandiano, Nerea Kortajarena y Ander Goikoetxea. El encuentro solicitado por EH Bildu le ha permitido a la presidenta Tamara Yagüe y al secretario general Eduardo Aretxaga insistir en sus críticas a una reforma fiscal que será finalmenta aprobada por el PNV, el PSE-EE y Elkarredin Podemos. Yagüe ya adelantó el pasado viernes en Radio Euskadi que la revisión prevista es un "castigo" para las empresas del País Vasco adoptada en clave política y sin valorar sus consecuencias económicas.
EH Bildu decidió desmarcarse de la propuesta fiscal impulsada por PNV y por el PSE-EE con una exigente contrapropuesta que incluía el establecimiento de una cuota mínima del Impuesto de Sociedades y la revisión de este impuesto durante un periodo de un año para su incremento. Además, la coalición abertzale reclamaba un control de los efectos de las deducciones fiscales para garantizar que se lograba con ellas los objetivos marcados.
La presidenta de Confebask, además, también se ha pronunciado en el encuentro con los parlamentarios de EH Bildu en los efectos de pérdida de competitividad del elevado abstencionismo laboral. Un de los muchos puntos en los que Confebask y EH Bildu discrepan pero que Otxandiano ha utilizado para apuntarse la importancia de "escuchar y compartir puntos de vista con todos los actores que influyen, de una forma u otra, en la vida social y económica del país".
Bildu anunció el inicio de una ronda de contacto con los agentes socioeconómicos vascos para abordar los cambios que exige la geopolítica internacional. Otxandiano reclama que el Gobierno vasco juegue un "papel activo como intermediador en la negociación que deben llevar a cabo los sindicatos vascos y la patronal" en la definición del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y ha cuestionado la negativa a "hablar" de Confebask sobre esta cuestión.
"Hay una oportunidad real de llegar a un acuerdo sobre el SMI vasco. Creemos que la patronal debe asumir su responsabilidad y participar en el diálogo para alcanzar dicho acuerdo", ha señalado Otxandiano tras el encuentro avalando la último propuesta realizada por ELA y LAB. Estos dos sindicatos reclaman que el SMI vasco se fije en 1.500 euros brutos en 14 pagas cuando con anterioridad su petición se movía entre los 1.600 y 1.795 euros mensuales. Los sindicatos reclaman a Confebask que participe en una reunión convocada para abordar esta cuestión el próximo jueves 20 de marzo. El SMI fijado por el Gobierno de España se establece en 1.184 euros mensuales con 14 pagas.