ANDALUCÍA
Flamenco

¡Baile que sabe a Gloria!

La gran maestra Merche Esmeralda cede el testigo a la joven sevillana Gloria del Rosario

Gloria del Rosario se presenta de la mano de la gran maestra Merche Esmeralda en Sevilla.
Gloria del Rosario se presenta de la mano de la gran maestra Merche Esmeralda en Sevilla.REMEDIOS MALVÁREZCAJASOL
Actualizado

'DE TU MANO'

Ciclo: XXV Jueves Flamencos / Espectáculo: 'De tu mano', de Gloria del Rosario / Baile: Gloria del Rosario / Artista invitada: Merche Esmeralda / Coreografías: Merche Esmeralda, Gloria del Rosario y Alberto Sellés / Cante: Pepe de Pura y Manuel Pajares / Guitarra: Liam Howarth / Lugar y fecha: Teatro Cajasol, de Sevilla. 14 de noviembre de 2024

CALIFICACIÓN: ****

Gloria García de Castro marcó sus pasos con el Ballet Flamenco de Andalucía (BAF) desde 2018 hasta 2022, en que la recordamos en la compañía de Patricia Guerrero, actual directora de BFA, y tras figurar en '¡Viva el Café Cantante!' (2023), del escritor José Luis Navarro, nos congratula la oportunidad que Cajasol le ha dado a esta interesante bailaora sevillana e impregnada de elegancia, que debe su nombre artístico de Gloria del Rosario a la gran maestra Merche Esmeralda, de cuya mano se ha presentado en la tierra que la vio nacer.

Gloria del Rosario, en cuyo remoquete incluye el de su madre, se ha presentado 'De tu mano', un corazón extendido de agradecimientos en el que subyace el homenaje a la admirada Merche Esmeralda, a quien la joven sevillana le ha ofrecido reconocimiento y nobleza, calidad y versatilidad, a más de un lenguaje corporal talentoso del que fluyeron en sintonía piezas cabalmente presentadas.

Al principio fue Merche Esmeralda ejecutando soberbiamente el 'Capricho árabe', de Francisco Tárrega, en tanto que bordaba en "off" la 'Clase Magistral' a Gloria del Rosario, quien presentó sus credenciales por seguiriyas con mantón, transmitiendo vitalidad y sevillanía, mostrando una panorámica del arte en torno al movimiento que acaba con el público entusiasmado. Y no porque en su cuerpo anide un caldo de cultivo de un lenguaje único, sino que lo empapa de distintos recursos, tal que la cantiña con bata de cola, con fantasías de grandeza y propensión a magnificar sus logros.

Tras la malagueña atarantá de Manuel Peralta y la taranta de Los Genaros de Pepe de Pura, percibimos en Gloria del Rosario una técnica muy eficaz en 'Medea', de Manolo Sanlúcar, sin evitar una mirada abierta, pero sin perder una línea propia de su maestra Merche Esmeralda, en concreto esa femineidad que eleva su concepto de la danza española a un apartado renovado, con un vocabulario personal que sabe mirar al pasado, como luego evidenció en la guajira, pero dando una vuelta de tuerca y atrapando al público en momentos como las llamadas, los paseos, la escobilla y el cierre.

Son instantes del pasado, pero actuales, renovados, y de una belleza sobrecogedora en el garrotín, generando movimientos bien planteados, quiebros límpidos y giros bien definidos, apoyándose en la complicidad del arrebato cantaor de Pepe de Pura y la expresividad de Manuel Pajares, unidos ambos al desparramar de notas del guitarrista francés Liam Howarth, músicos que devienen en parte vital de un espectáculo que honra a lo insustituible, la homenajeada, Merche Esmeralda.

Y allí estuvo la gran maestra reinando en el proscenio desde lo que fascina y emociona, el arte sin artificios, impactando con esa mezcla de profundidad y garbo que refleja la madurez de una de las perlas más preciadas de la escuela sevillana, que a la postre puso de manifiesto las inquietudes de quien está entre dos mundos, el presente y el futuro, es decir, en terreno de nadie, más que en el suyo.

Merche Esmeralda bailó con Gloria del Rosario 'Que también es de Sevilla', las sevillanas de Manuel Pareja-Obregón, articulando movimientos tan poéticos y singulares que atraparon al espectador, optando por penetrar en la complejidad de la danza con su alumna y ahondando en la expresividad de dos cuerpos con un impulso motriz que sólo puede nacer de las entrañas.

Sabia lección, pues, la de la sevillana del barrio de La Palmera, rica en franqueza y esa distinción que si nos llama la atención es porque inunda el escenario de tanta personalidad y magia que, finalmente, lo que hace es construir nuestra identidad dancística de tal modo que nos mueve del asiento, nos atrapa y nos seduce.

Y es en Merche Esmeralda en quien se inspira la protagonista de 'De tu mano' para pintar su propio lienzo, una visión entre el pasado y el presente de gran plasticidad, con sobrias y cambiantes coreografías, logrando momentos fantásticos, composiciones en las que ofreció un juego de equilibrio tan bien entrelazado que volvía a evidenciar que lo que antes del comienzo era un proyecto, una ilusión, un camino, ahora está consolidado y avanza con paso firme.

'De tu mano' es un ejemplo del trabajo impoluto de la exigente escuela sevillana, una propuesta que requiere no sólo pericia dancística, sino un elevado nivel de cultura del baile según Sevilla, pues se nos antoja como una recopilación de experiencias, una constelación de fragmentos de vida, de ideas, de reflexiones, un gabinete de curiosidades, en suma, que entronca con la idea de ese agradecimiento al que hace referencia el título.

La poliédrica escuela sevillana de baile es, a este tenor, uno de los motores de nuestra vida cultural, pero para describirla en el escenario no sólo hay que conocerla, sino que hay que hacerlo como Gloria del Rosario, seduciendo al público tanto con los colores del alma como con los matices del cuerpo, esto es, revelando la solidez de un trabajo que potencia la individualidad de la intérprete, pero también la calidad de lo que estremece. Y eso no sólo lo aporta una técnica excelente, sino la esencia del ser artista, de ahí que, por la idea expuesta y por su ejecución, 'De tu mano' se merece un largo recorrido.