- Política IU ya valora salir del Gobierno porque "Sánchez ha abierto la mayor crisis" pero Yolanda Díaz quiere "agotar la legislatura"
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Izquierda Unida, que tiene a Sira Rego en el Gobierno, amagó ayer con marcharse del Ejecutivo de coalición por tener una postura "radicalmente en contra" del plan de aumento del gasto militar impulsado por Pedro Sánchez. Los casi 10.500 millones de inyección para defensa y una compra de balas a Israel en pleno "genocidio en Gaza" son dos temas que han desatado la "mayor crisis" con el PSOE. Esto provocó que un destacado dirigente de IU como Enrique Santiago abriera la puerta a abandonar el Gobierno. Sin embargo, desde la dirección federal de IU enfriaron horas después esta posibilidad haciendo equilibrios para no desautorizar al líder del PCE.
Fuentes de IU descartan un desenlace de ruptura, no obstante, la simple aparición de un debate así desde algunos sectores de la formación explicita hasta qué punto las políticas de Sánchez están poniendo en "contradicción" a Sumar y a algunos de los partidos que forman parte del socio minoritario. El caso más claro es IU, una formación con un ADN netamente antimilitarista y que nació al calor de las manifestaciones contra la OTAN, pero no es la única, pues Compromís o Chunta también tienen posiciones muy tajantes.
De hecho, la fortaleza de este ideario antibelicista en estas y otras fuerzas en el seno de la alianza y del grupo parlamentario han llevado a Díaz a tener un discurso más duro en contra del gasto militar, así como que Sumar haya reivindicado también la salida de España de la OTAN.
En este contexto, el plan de 10.500 millones, como aperitivo al proyecto de Presupuestos que pueda venir para 2026, plantea la pregunta de si es sostenible permanecer en el Gobierno y qué coste puede tener para Díaz y sus socios, cuando hay un Podemos dispuesto a hurgar en esas contradicciones. La situación desquicia a todos por diferentes razones, pues compromete sus votos a Sánchez en un escenario que es él o el dúo PP-Vox.
Como denunció ayer Santiago, el PSOE ha entrado en una "dinámica peligrosa" en la relación con Sumar al "imponer las decisiones de forma unilateral sistemáticamente". Que traducido significa que no está dando margen alguno para atemperarlas o rebajarlas. Es por esto que el líder de IU, Antonio Maíllo, cargó las tintas contra el presidente por "abrir una crisis de gobierno" con una decisión "unilateral" en el gasto militar y que le culpe de manejarse con "irresponsabilidad" en esta crisis.
Asimismo, fuentes de la dirección federal de IU remarcaron la gravedad del "incumplimiento" del PSOE con la compra de material bélico a Israel. "No es menor: debilita al Gobierno de coalición y supone un ataque al corazón del acuerdo de gobierno que lo sostiene", avisan.
A partir de ahí las consecuencias arrojan lecturas distintas. Santiago señaló que se baraja responder con "todos los escenarios", o sea, incluso con irse del Gobierno. Mientras que el coordinador federal evitó suscribir ese marco porque el foco, más que en salir, dijo en la cadena Ser, tiene que estar en los incumplimientos del PSOE y, en todo caso, "el que tiene que salir es Marlaska si no rectifica" el contrato de balas con Israel.
Otras fuentes de la dirección de IU subrayan que es evidente que no se puede estar en el Ejecutivo "a cualquier precio". No obstante, recelan de salirse de éste porque la crisis podría ser aprovechada por Sánchez para adelantar las elecciones y "cargar a IU el muerto" de que pone en bandeja gobierno a la derecha. Estas fuentes, que alejan esa ruptura, apuestan por presionar al PSOE para que "rectifique" y no por irse del Ejecutivo, porque "IU no es quien ha incumplido el acuerdo, sino que ha sido el PSOE". Apoyar externamente al Gobierno desde el grupo parlamentario, avisan, haría a Sánchez poner "el turbo para el adelanto" electoral.
En medio del terremoto, la oficialidad de Sumar salió rotunda en defensa de la continuidad en el Gabinete, en público y privado. La primera en hacerlo fue la propia Díaz antes de estallar la crisis. Aunque habló de la "muy buena salud" del Ejecutivo, en contradicción con la lectura "grave" de IU, apostó a las claras por "agotar la legislatura". Tras el incendio, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, garantizó que la presencia de Sumar en la coalición no estaba en riesgo "en ningún caso" y abogó por "continuar con el PSOE hasta 2027".
Al margen de este lío, el clima de malestar en el grupo de Sumar es fuerte. IU ha pedido la convocatoria urgente de la mesa de partidos de la alianza para analizar la crisis. Esta cita se dará en las próximas horas y ahí se "examinará" el "mecanismo de relación" con el PSOE. La explicación de IU es que se enteraron del plan de 10.500 millones en el Consejo de Ministros y no antes. Eso entraría a priori en contradicción con que Díaz presentara observaciones en un documento escrito. A no ser que la vicepresidenta no les avisara.