Sandra Valero, la representante española en Eurovisión Junior 2023, ha pisado este miércoles por primera vez el escenario de Niza. "¡Hala!, ¡qué guay!", ha exclamado nada más subir, a las 12.40 horas. La representante de España ha realizado tres pases de Loviu en el Palais Nikaïa en la que ha sido la segunda jornada de ensayos del festival.
Sandra Valero y su equipo de baile -Juan Diego, Evelyn, Marcos y Elia- se han mostrado muy satisfechos al terminar: "El último pase ha sido el mejor. Me he sentido muy a gusto y estoy satisfecha de ver que el trabajo está y que soy casi mi mejor versión en el escenario".
Las sensaciones en la delegación española son muy buenas, según ha transmitido RTVE en una nota: "Estamos contentos con el primer ensayo. Hay que hacer algunos cambios como es lógico, pero en general el feeling es muy bueno. El contenido de las pantallas también está genial y estamos satisfechos".
La letra de Loviu es el hilo conductor de la actuación de Sandra Valero. Todo va en la misma línea: la puesta en escena, el vestuario y la coreografía. La escenografía está pensada como si fuese un musical, con su inicio, su nudo y su desenlace. La cantante es un personaje inspirado en mujeres pioneras y referentes de la historia: la puesta en escena hace referencia a Matilda, la protagonista de la novela infantil de Roald Dahl, con sus superpoderes; o a Ellie, de la película Up, una niña que siempre soñaba con viajar. "Empezamos la actuación en la habitación de Sandra y hasta el final utilizamos su imaginación para poder contar la historia", explica Javier Pageo, director artístico de España en Eurovisión Junior 2023.
En el escenario predomina una gran estructura de maletas que simulan un avión y sus alas. Los visuales que se muestran en las pantallas también cobran gran importancia. "Los utilizamos como si fuese el telón de un teatro; cuando se desvanecen los fondos, cambiamos de escenarios", indica Pageo, "gracias a esto, durante toda la actuación están pasando cosas en lugares distintos". Las imágenes nos llevan a visitar ciudades europeas y sus monumentos más emblemáticos, así como otros lugares del mundo como la Estatua de la Libertad, el Taj Mahal o el Cristo Redentor.
El vestuario también va muy de la mano de esta puesta en escena y de la propia idea de los viajes en torno a la que gira Loviu. Sandra Valero lleva un traje de superheroína viajera que quiere conocer otros países, idiomas y culturas. Según Raúl Amor, estilista y figurinista de RTVE encargado de vestir a los artistas españoles en Eurovisión, "su look está inspirado en Amelia Earhart, la primera mujer piloto en cruzar el océano Atlántico". Los bailarines, vestidos con los monos de mecánicos de aviación, llevan impresos sellos de pasaportes de los lugares por los que han viajado.
Albert Cornelles, el coreógrafo, se muestra contento con los primeros pases de Loviu: "Con cada pase era evidente que iban ganando en el escenario. Al tener una estructura nueva de la escenografía, se notaba que al principio iban con más cautela pero el cambio en el tercer pase ha sido brutal".
La coreografía, ha explicado, va in crescendo durante toda la actuación. Al principio, es más tranquila, con Sandra Valero sola en su habitación, y a medida que empieza a viajar se van incorporando poco a poco los bailarines. "La idea es que al final acaben juntos los cinco, como un grupo de amigos que interactúan con el público y se divierten, invitando a todo el mundo a su fiesta", relata.
A nivel vocal, Sandra Valero también ha realizado un buen ensayo, según la coach vocal Verónica Ferreiro: "Es una niña muy segura cantando. Al principio estaba más rígida porque el sonido es nuevo, la acústica del espacio es nueva, y estaba conociendo el escenario y visualizando el espacio. Hemos hablado entre ensayos para soltar un poco y que la adrenalina no la tense de más. El segundo y el tercero ya ha estado mucho más equilibrada de energía y de voz y más familiarizada con todos los elementos".
El jueves, Sandra Valero y los bailarines volverán a ensayar en el hotel para pulir detalles vocales y de coreografía. Por la tarde ensayarán el número de apertura de la gala, el desfile de banderas y la canción común con el resto de países. El próximo ensayo sobre el escenario tendrá lugar el viernes 24 de noviembre a las 11:00 horas. Será momento para ajustar la puesta en escena de España y que podrá verse el próximo 26 de noviembre en la gala de Eurovisión Junior 2032. La representante española actuará en primera posición.