BALEARES
Turismo
Medidas contra la masificación

Baleares creará un nuevo impuesto a los coches de fuera de las Islas y subirá la 'tasa verde' a turistas y visitantes en crucero

El Govern de Prohens presenta su primer plan para paliar los efectos de la saturación turística. Triplicará la tasa a los cruceristas y perseguirá la oferta turística ilegal con multas de hasta 500.000 euros

Prohens, interviniendo en un congreso sobre turismo celebrado en Palma.
Prohens, interviniendo en un congreso sobre turismo celebrado en Palma.EFE
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El gobierno balear que preside Marga Prohens (PP) ha fijado su primera batería de medidas para tratar de paliar los efectos negativos de la masificación turística. Es la primera fase de lo que el Ejecutivo regional llama el plan para la "contención" y la "sostenibilidad turística".

Entre otras medidas, el Govern contempla la creación de un nuevo impuesto a los vehículos vacacionales, coches de uso privado que estén matriculados fuera de las Islas y que circulen temporalmente por el archipiélago.

La tarifa de este nuevo impuesto será variable en función de las emisiones de los vehículos y del tiempo que vayan a permanecer circulando en el territorio. Oscilará entre los 30 y los 85 euros en función de las emisiones y del tiempo de circulación.

Un coche estándar particular que llegue de un puerto peninsular podría afrontar un pago que ronde los 50 euros por un viaje. En el caso más caro, un vehículo que permanece en las Islas unos meses para ser dedicado al alquiler pagaría unos 85 euros.

Este nuevo impuesto gravaría tanto a los coches de alquiler (afectará a todos aquellos que no figuren en los registros de vehículos no turísticos de las Islas) como a los vehículos particulares que lleguen a alguna de las islas desde el territorio peninsular para permanecer circulando por ellas durante menos de seis meses. Es decir, a todos aquellos que no pagan en las Islas impuesto de circulación.

En el caso de los rent a car, se pretende así gravar al parque de vehículos que cada año se incrementa sustancialmente en los meses de verano, con la llegada de coches de fuera de las Islas. Sólo el año pasado se calcula que circularon en torno a 100.000 coches de alquiler por las carreteras insulares.

Las empresas de coches de alquiler que tengan todos los vehículos matriculados en Baleares y ya paguen impuesto (que son las de menos tamaño) serán incentivadas fiscalmente, con lo que no tendrán que hacer frente a ese impuesto.

La creación de ese nuevo impuesto, que tendría como objeto de gravamen las emisiones, es de momento una propuesta que no puede tramitarse por la vía del decreto ley y, por tanto, debe ser antes debatida y aprobada en el Parlament balear, donde el PP no tiene la mayoría.

El vicepresidente y portavoz del Govern, Antoni Costa, ha remarcado que si no logra un consenso con otros partidos no se ejecutará. "Es una propuesta pionera en España", ha declarado. "No es una medida recaudatoria sono disuasoria".

Hasta 6 euros de ecotasa

El dinero que se recaude con este nuevo tributo iría a financiar inversiones en transporte público y a compensar el impacto de las emisiones, según ha anunciado el gobierno autonómico.

Prohens incrementará igualmente las tasas que pagan todos los turistas por pernoctar en las Islas. La llamada ecotasa, un impuesto verde creado hace más de dos décadas por el gobierno del PSOE, rescatada hace nueve años, y que ahora se verá incrementada de forma escalonada en función de las características de cada establecimiento.

El llamado Impuesto de Turismo Sostenible se incrementará entre un 66% y un 200% entre los meses de junio, julio y agosto. El máximo será de 6 euros por noche y persona.

En la práctica se traducirá en una subida de 1 a 2,5 euros por noche en los tramos más bajos y de 4 a 6 euros por noche en los tramos más altos, los hoteles y apartamentos turísticos de mayor categoría. En enero y febrero la tasa no se pagará, se elimina.

En lo que respecta a los cruceros, la tasa para este tipo de viajeros se triplicará en los meses de verano, pasando de 2 a 6 euros por noche y persona. Es la mayor subida.

El Govern también quiere incrementar el coste de las multas que pague la oferta turística ilegal, alcanzando en su rango superior los 500.000 euros de sanción, más de un 25% más del umbral actual. Ampliará además la persecución colaborando con las autoridades policiales y responsabilizará a las plataformas comercializadoras.

El Ejecutivo autonómico prohibirá igualmente las plazas turísticas en viviendas plurifamiliares.

El contexto

El Govern de Prohens reacciona con esta primera batería de medidas al debate público que desde hace unos años crece en Baleares en torno a los límites y los efectos aparejados al turismo de masas.

"Estas Islas han llegado a su límite y el patrón de crecimiento ya no es sostenible y es imprescindible afrontar con valentía la transformación del modelo", ha manifestado el consejero de Turismo, Jaume Bauzà (PP), quien también ha remarcado la necesidad de fomentar la "desestacionalización". Es decir, la demanda en los meses de temporada baja.

Hasta esta legislatura, los partidos de izquierdas y de corte ecologista habían patrimonializado ese debate, abanderando el decrecimiento turístico.

El actual Ejecutivo siempre ha rehuido de ese término y del concepto de decrecimiento, defendiendo que apuesta no por un decrecimiento sino por una "contención", y enfatizando siempre que el turismo es el principal pulmón económico de la región. Sólo el año pasado los turistas se dejaron en sus viajes a las Islas más de 20.000 millones de euros.

Prohens situó este apartado en su discurso de investidura en 2023, cuando ensalzó el turismo como actividad esencial en las Islas y dijo que "pararía el camino hacia el decrecimiento". Sin embargo, apostilló, "esto no quiere decir crecer ilimitadamente". Ya entonces habló de la necesidad de "gestionar el éxito turístico para garantizar el bienestar de los ciudadanos".

Con 18,7 millones de visitantes en 2024 (más de 15 veces su población fija), Baleares sigue batiendo récords año tras año, con un repunte especial y de dimensiones inesperadas tras la pandemia.

Este año se calcula que pueden llegar a las Islas 20 millones, lo que supondría alcanzar un hito histórico para una región cuyo PIB depende en más de un 40% del sector.

De momento, está por ver cuándo podrán aplicarse estas medidas anunciadas hoy. El Govern ha anunciado que las quiere aplicar de manera "inmediata" aunque falta por determinar si serán aplicadas este verano.

La propuesta del Govern debe todavía ser debatida entre los grupos parlamentarios, ya que el Ejecutivo del PP, que no tiene mayoría parlamentaria, pretende sacarlas adelante con el máximo consenso de los diferentes grupos políticos.