Una operación de la Policía Nacional con autoridades de Bolivia, Ameripol e Interpol ha permitido la detención en ese país de América Latina de 5 personas a las que se considera responsables de facilitar los visados falsos con los que 69 ciudadanos bolivianos pretendían entrar en España a bordo de un crucero el pasado 2 de abril de 2024.
Los 69 pasajeros -55 adultos y 14 menores de edad acompañados- llegaron al puerto de Barcelona a bordo de un buque crucero procedente de Brasil e iban provistos de visados Schengen falsos, motivo por el que se denegó la entrada a 65 de ellos y solo se permitió la entrada en territorio nacional a un adulto y tres menores de edad por razones humanitarias.
Según ha informado la Policía Nacional, a raíz de las declaraciones obtenidas de los pasajeros provistos de los documentos falsos, y del resto de pesquisas realizadas por los investigadores, se pudo determinar la existencia de 5 agencias de viajes ubicadas en Bolivia implicadas en la confección y distribución de los visados falsos.
A partir de esa información la Policía Nacional puso en marcha los mecanismos de cooperación internacional a través de las agencias Ameripol e Interpol, lo que permitió a los agentes trabajar de manera conjunta con las autoridades bolivianas.
Fruto de esos trabajos se logró la identificación de los responsables de las agencias de viajes implicadas en los hechos y la detención en Bolivia de 5 personas como responsables de la elaboración y distribución de los visados falsos y de toda la logística necesaria para la gestión del viaje, como los billetes de avión y barco, reservas de hoteles y seguros entre otros trámites para facilitar el viaje.
Los ciudadanos bolivianos que viajaban con visado falso en un crucero desembarcaron en una zona de tránsito del puerto de Barcelona, donde hicieron los trámites de deportación, y el barco turístico continuó su ruta en abril de 2024, hace ahora justo un año. Así lo acordaron la Delegación del Gobierno en Cataluña, en coordinación con la Policía Nacional, y MSC Cruceros, las tres partes que intervinieron en el conflicto.
El buque procede de Sao Paulo (Brasil) y, entre otras paradas, hizo escala en Málaga, donde los ciudadanos bolivianos no llegaron a desembarcar pero ya recibieron el aviso de las autoridades del problema con su documentación. Los afectados decidieron seguir hasta Barcelona, que era su destino final.