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Cinco en lo que va de semana. Banksy sigue activo estos días en Londres, donde este viernes 9 se descubrió una pieza más de su enigmática serie de grafitis de animales. El artista urbano reproduce esta vez las siluetas de dos pelicanos pescando peces en un simbólico enmarque: la fachada y el cartel luminoso de unfish and chips, establecimiento esencial en la geografía británica que sirve pescado y patatas fritas, tradicionalmente para consumir en la calle o en casa.
La nueva escena se localiza en Walthawstow, barrio multicultural del noreste de Londres. La silueta principal del anónimo creador asociado con la comunidad artística de Bristol reproduce con acostumbrada efectividad al ave acuática batiendo las alas y a punto de engullir un pescadito en el centro de la fachada de Bonners Fish Bar, nombre del establecimiento.
En extremo de la composición, otro pájaro calcado también en negro acaba de atrapar con el pico uno de los peces que decoran el cartel del restaurante de pescado. Da la impresión de que el dibujo forma parte permanente de la identidad gráfica del fish and chips. Que los pelicanos son tan antiguos como el mismo Bonners, con la excelente reputación que tiene entre los vecinos del distrito.
Banksy despejó dudas sobre la autoría de su último grafiti, como viene haciendo puntualmente con los cuatro trabajos anteriores de la serie de animales. Subió a Instagram una fotografía de la composición, que decora la pared de la esquina de Pretoria Road con Northcote Road. La imagen de las aves comiendo peces se exhibe ahora junto a reproducciones de obras supuestamente complementarias que se han encontrado en distintos barrios de Londres desde el lunes 5 de agosto.
La BBC sostiene que la colección sigue incompleta. Se esperan por tanto nuevos trabajos de refuerzo a las siluetas de un lobo aullando hacia el firmamento, tres monos colgados de una vara en un puente de la vía ferroviaria, dos elefantes asomados a sendas ventanas y una cabra subida a un frágil pedestal.
El misterio en torno al significado de la serie crece tanto como peligran sus partes integrantes. El grafiti del lobo fue robado a las pocas horas de que se descubriera sobre la tejavana de un solar de Peckham, en el sur de la capital. Y la cabeza y la trompa de un elefante han sido desfiguradas con rayas grises a través, según la imagen difundida en las últimas horas. Se ha roto el efecto de pareja perfecta.