Arabia Saudí ha tenido un protagonismo inédito en la Asamblea de la Organización Mundial del Turismo (OMT) que se ha celebrado estos días en Madrid. El país, que se abrió al turismo poco antes de la pandemia, intentó sin éxito llevarse a Riad su sede, que lleva en la capital de España desde la creación de este organismo.
El ministro de Turismo saudí explica a EL MUNDO el plan de apertura al turismo que tiene el país y las razones que les llevaron a pedir el cambio de sede del organismo.
- Su país quiere atraer visitantes, al margen del turismo religioso. ¿Van a tomar algún tipo de medida aperturista para ello?
- Siempre hemos basado nuestra riqueza en el petróleo, pero hemos querido diversificar nuestra economía y explorar oportunidades y el turismo es uno de los sectores más atractivos. Lo tenemos todo para tener éxito: historia y cultura, diversidad, naturaleza, mar y bellas playas. Recibimos cada año 15 millones de turistas religiosos y en septiembre de 2019 abrimos el país a los turistas, pero llegó el Covid. Tenemos un país muy bello y los saudíes son muy hospitalarios y muy amigables, como los españoles. Queremos que la gente pueda visitar y explorarlo. El 75% de la población está vacunada con dos dosisy estamos volviendo a la normalidad. Somos muy optimistas sobre el futuro. Tenemos que ser optimistas.
- ¿Qué hay de las mujeres? ¿Las occidentales podrán visitar el país con libertad?
- Arabia Saudí está abierta a las mujeres. Cualquiera puede meterse en la web y obtener una visa e ir a Riad o a cualquier sito. Nos encantaría ver a más mujeres. Vendrán y ya estan viniendo. Es cierto que las mujeres de Arabia Saudí van cubiertas de negro pero es si usted viene, es su derecho llevarlo o no. En la web verá el código de vestimenta pero si no quiere llevarlo puede ir así vestida, más moderna. El país ha cambiado mucho. Tengo siete delegados de los cuales cinco son mujeres y mi viceministra es mujer. No hablamos de hombres y mujeres, sino de gente cualificada. Hablar de género es cosa del pasado. El país está absolutamente abierto a las mujeres.
- ¿Por qué pidieron llevarse la sede de la OMT de Madrid a Riad?
- A principios de 2020 hablamos con algunos países sobre cómo fortalecer el sector y cómo hacer más fuerte la organización y el consenso fue que la OMT necesita ayuda, tiene que ser más fuerte. Hemos perdido 62 millones de empleos en global y mucha contribución al PIB. Y no hemos hecho nada. Sólo hemos visto al sector hundirse. No hay suficiente apoyo. La OMT es nuestra voz en naciones unidas. La OMS es fuerte, y la Unesco es fuerte, pero no la OMT. Por eso, propusimos un programa para invertir en la organización. Fue respaldado por muchos países y nos dijeron que si íbamos a poner este programa en marcha, teníamos que liderarlo y monitorizarlo y nos plantearon por qué no movíamos la sede a Riad, pero el Gobierno español lo rechazó.
- ¿Qué les dijo?
- No fue un rechazo. Hablamos y lo consultamos. Algunos estados miembros nos preguntaron cómo implantar el plan y tener la sede en Riad. Lo consultamos y el Gobierno dijo que implementaríamos el programa conla sede de la organización en Madrid y estamos de acuerdo. Fue pacífico y amistoso. Somos países amigos, empezando por los reyes. Nuestro Rey es amigo del Rey durante años. Las relaciones entre Arabia Saudí y España han sido muy estratégicas y muy amistosas y muy cercanas. No podemos hacer nada que pueda dañar la relación. Ahora, en la asamblea de la OMT hemos planteado un plan para rediseñar el turismo, hunto con España, y hacer la organización más fuerte.
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