LUNES
YOLANDA
Las denuncias de abuso y acoso sexual contra Íñigo Errejón y Juan Carlos Monedero han desembocado en una nueva víctima: Yolanda Díaz. Que resulta que un día, en el patio del Congreso, a un periodista se le ocurrió soltarle un «cada día estás más guapa» y la ministra se fue a contárselo a Aimar Bretos a la Cadena Ser. «Ojalá fuera un problema de partidos, pero no va de partidos, va de violación de derechos fundamentales y de los derechos humanos», dijo la ministra, sin que la audiencia haya podido resolver de qué problema se trata para andar metiendo a Naciones Unidas.
Por si acaso, el líder de Vox, Santiago Abascal, enseguida colgó un vídeo para ayudar a aclararlo, en el que la ministra le suelta al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, «qué guapo estás», lo que vuelve a demostrarnos que antes que a una coja se pilla a una mentirosa, o a alguien que va por el mundo como una persona normal y corriente. «Imagínese lo que vivimos las mujeres a diario», nos mandaba a reflexionar Yolanda Díaz, ante la imposibilidad de plantearnos el reto de imaginar lo que vive Yolanda Díaz.
Ahora no sé por qué está tardando tanto Antonio Garamendi en sumarse con un «imagínese lo que vivimos los empresarios a diario con este Gobierno cada vez que nos sueltan un cumplido para subir el salario mínimo y reducir la jornada laboral».
«¿Yo qué hago ante esto?», le dijo Yolanda Díaz a los periodistas tras el cumplido, como pidiendo ayuda para saber qué utilidad podría sacarle. De momento, ha intentado universalizar lo de Errejón y Monedero, si no en todas las mujeres, por lo menos en su persona. Con ello pretende exhibir un cambio de actitud en el partido, como si ahora pensara denunciar todos los casos de abusos y acosos, empezando por ese periodista que pasaba por ahí. Porque ella, de lo de Errejón y Monedero, ni idea, pero está «con las víctimas», como espera que las víctimas, tras lo que ha contado del pasillo del Congreso, estén con ella.
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Mientras el mundo se debate entre lo que sucederá con Ucrania, con Putin, con Oriente Próximo, con Trump y con Europa tras las elecciones alemanas, España sigue a la suya, que no es otra cosa que los problemas de Carles Puigdemont.
La condonación de la deuda y un aumento de la partida de Mossos sirven para mostrar una vez más que este país funciona a golpe de chantaje, en concreto de Cataluña, con el agravante de la competición entre ERC y Junts por ver quién chantajea mejor.
La retirada de la cuestión de confianza al presidente del Gobierno refuerza la idea de que hay Gobierno de Sánchez para largo, lo que significa que hay Gobierno de Puigdemont para largo.
MARTES
CALLEJA
El aventurero Jesús Calleja abandonó el planeta por unos segundos y se puso a contemplarlo desde fuera. Un privilegio al alcance de unos pocos para vivir una de esas experiencias que te cambian la vida. Cinco horas después del aterrizaje, todavía cegado por lo visto, nos cambió la vida a los demás cuando soltó: «Aún no he visto los whatsapps, no sé qué está pasando en el mundo».
VIERNES
JÉSSICA
José Luis Ábalos le contó a Alsina en directo que su relación de pareja con Jéssica R. era «como las que tienen normalmente todas las personas». Lo que pasa es que, tras la declaración de Jéssica R. ante el Tribunal Supremo, empiezo a pensar que mi relación de pareja es de lo más anormal.
Jéssica R. reconoció que fue contratada por dos empresas públicas ligadas al Ministerio de Transportes. Ya había contado Koldo en sede judicial que la contrataron a ella porque necesitaban a personas de confianza, y tenía razón, porque trabajó menos que el hermano de Pedro Sánchez y lo explicó mejor. Nada que no hayamos visto antes en Los Soprano, en la temporada en que se ven obligados a contratar a parte de la mafia para una obra pública, como parte de una mordida, dividiendo los puestos entre los de no trabajar y los de no ir. A Jéssica le tocaron dos veces los de no ir.
Desde el principio de la investigación, a la UCO ya le pareció muy sospechoso lo del piso, lo de los viajes internacionales con el ministro y, en definitiva, lo cara que le estaba saliendo su relación a Ábalos, pero ahora ya sabemos que le salía baratísima.
Dios me libre de entrar a juzgar la relación sentimental entre Ábalos y Jéssica R. Ni siquiera, como publican algunos medios, si se trataba de una relación contractual. Lo que sí sé es que, a partir de ahora, cuando nos pregunten a cualquier español, en esas encuestas que se hacen, si alguna vez pagamos por ciertos servicios, no tengo claro qué tenemos que responder.