El lehendakari Imanol Pradales pretende "dar la batalla" junto a otras 70 regiones europeas para evitar que la distribución de los millonarios fondos de cohesión europeos se realice desde los gobiernos estatales. "Nos estamos jugando mucho dinero", ha advertido Pradales en los últimos instantes de la doble jornada de trabajo en Luxemburgo y Bruselas; su primer viaje al extranjero que copia al desarrollado en abril de 2013 por su predecesor Iñigo Urkullu.
La Unión Europea cuenta planificó destinar 52.600 millones de euros en el periodo 2021 a 2027 en los cinco fondos estructurales con los que se intenta homogeneizar el desarrollo económico y social de todos sus miembros. Fondo estructurales ajenos al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) que ahora vuelven a centrar el interés de todas las administraciones. Pradales ha cerrado hoy su viaje "al corazón de Europa" con un encuentro auspiciado por el länder de Baviera en el que ha defendido el papel de "las regiones y las naciones sin estado" para seguir participando directamente en el reparto de estos fondos ante la intención de la presidenta de la Comisión Ursula Von der Leyen de centralizar su gestión en los gobiernos de cada Estado.
Pradales ha reconocido su "preocupación política" por la gestión de estas inversiones segundos después de contener su satisfaccción por el "compromiso absoluto" que le ha manifestado la presidenta del Europarlamento Roberta Metsola en la puesta en marcha de la Macrorregión Atlántica, el proyecto que impulsó Iñigo Urkullu. Pradales ha anunciado una reunión en febrero o marzo en Bruselas para impulsar esta Macrorregión y "un evento" a finales de 2025. Satisfacción que también ha transmitido respecto a la petición de que el euskera sea una lengua oficial en la Unión Europea. El lehendakari confía en el grupo de trabajo constituido en el Parlamento Europeo y ha reclamado "confianza y tiempo" para obtener esta oficialidad del euskera en las instituciones europeas.
Pradales cierra así su primer viaje fuera de España que calca al realizado por el lehendakari Iñigo Urkullu hace 11 años. Urkullu, con un gobierno en minoría, también se desplazó a Bruselas donde mantuvo reuniones con el presidente de la Comisión Europea Durao Barroso, con la comisaria de Interior y con el presidente del Consejo. Entonces, el lehendakari Urkullu centró sus gestiones en Europa en la "reactivación económica" después de la crisis de 2008 y advirtió de que los "retos" a los que se enfrentaba Euskadi solo podían responder dentro de Europa. Pradales ha destacado hoy que por primera vez un presidente vasco se ha reunido con la presidenta del Europarlamento, el Legislativo comunitario en el que participan los 720 diputados de los 27 estados miembros.