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Como indica la nutricionista Clara Sánchez, alguna intolerancia alimentaria, el síndrome del intestino irritable, la dispepsia (indigestión), el exceso o la falta de fibra o los gases son algunas de las principales causas de la hinchazón de tripa. Un remedio natural para aliviar este trastorno, también conocido como distensión abdominal, es practicar yoga. Y es que, entre los múltiples beneficios de esta disciplina, se encuentra el de mejorar la digestión.
Cómo el yoga te puede ayudar a mejorar la digestión y reducir la hinchazón
Tanto solo como combinado con otros tratamientos, el yoga te puede ayudar a mejorar la digestión. "El yoga puede ayudar a aliviar los síntomas generales de la digestión, como los gases, el estreñimiento y la hinchazón", recalcan los expertos de Arhanta Yoga, centro de formación para profesores de yoga.
Algunas asanas o posturas de yoga aplican presión o compresión sobre los órganos digestivos y otras hacen un estiramiento. Estos cambios de presión mejoran la circulación, llevando un mayor flujo de sangre a estos órganos para activar su funcionamiento. Además, estos movimientos sirven también para desplazar eficazmente los alimentos por el tubo digestivo.
Por otro lado, el yoga ayuda a calmar el sistema nervioso, lo que también repercute en la salud digestiva. "Para la salud digestiva es importante que tomes regularmente medidas para controlar tus niveles de estrés y relajarte intencionadamente. El yoga ofrece muchas prácticas de relajación, como ejercicios de respiración, meditación o posturas relajantes", añaden desde Arhanta Yoga.
Posturas de yoga para mejorar la digestión
Desde Yogimi, comunidad de yoga creada por la profesora y actriz Patricia Montero, señalan cuáles son las posturas de yoga que ayudan a mejorar la digestión:
- Adho mukha svasana o perro boca abajo: consiste en elevar el cuerpo estirando los brazos y las piernas y subiendo las caderas hasta formar una V invertida. Ayuda a reducir la hinchazón y los dolores estomacales.
- Bitilasana Marjaryasana o gato-vaca: desde la posición de cuadrupedia, primero inhala y arquea la espalda hacia abajo sacando los glúteos y levantando la cabeza y, después, exhala, redondea la espalda y baja la cabeza. Sirve para mejorar el funcionamiento de los intestinos.
- Malasana o guirnalda: empieza de pie con los pies ligeramente separados y apuntando hacia afuera. Con la espalda erguida, ve bajando lentamente hasta colocarte en cuclillas. Después, junta las palmas de las manos en posición de oración y presiona los codos contra las rodillas. Activarás el sistema digestivo, particularmente el colon, eliminando así toxinas y desechos.
- Navasana o barco: ponte sentada con el torso erguido, las rodillas flexionadas y los pies apoyados en el suelo. A continuación, debes subir los pies e inclinar el tronco hacia atrás de manera que puedas extender las piernas hacia el techo y formar una V con el cuerpo. Ayuda a regular las funciones del intestino.
- Dhanurasana o arco: tumbada boca abajo, ve subiendo el tronco y las piernas y estirando los brazos hacia atrás hasta conseguir agarrar los pies con los manos. Estimularás los órganos del abdomen y equilibrarás todo el aparato digestivo.
- Ardha matsyendrasana o media torsión sentada: siéntate con las piernas estiradas, dobla una rodilla, gira el tronco hacia ese lado y coloca el brazo contrario en el exterior de la pierna doblada. Esta torsión ejercerá un masaje en los órganos abdominales.
- Apanasana o rodillas al pecho: tumbada boca arriba, dobla las piernas y sujeta las rodillas con los brazos entrelazados. Esta postura ayuda a desintoxicar el cuerpo y a liberar gases.
- Balasana o niño: de rodillas y con los glúteos en los talones, lleva el cuerpo hacia delante, baja la cabeza y estira los brazos. Activarás la circulación en la zona abdominal.
La respiración de yoga con la que mejorarás la digestión
Como decíamos, algunas técnicas de respiración que se utilizan en el yoga, llamadas pranayamas, también pueden ayudarte a mejorar la digestión. En este sentido, la instructora de yoga Xuan Lan recomienda la Kapalabhati. Entre otros beneficios, ayuda a tonificar el sistema digestivo, activa el hígado, el páncreas y los músculos abdominales ayudando a sus funciones y masajea los órganos internos. La experta la realiza en esta sesión de su canal de YouTube para mejorar la digestión. Estos son los pasos a seguir:
- Siéntate con la columna erguida y cierra los ojos si te ayuda a mantener la concentración.
- Inhala con la nariz y exhala también con la nariz todo el aire hasta vaciarte.
- A continuación, inhala a la mitad de capacidad también por la nariz.
- Ve exhalando de nuevo por la nariz de forma rítmica y forzada durante unos 10 o 15 segundos. Debes bombear el abdomen y meter hacia dentro el ombligo en cada exhalación.
- Vuelve a inhalar por la nariz y mantén el aire el tiempo que puedas.
- Por último, exhala el aire por la nariz. Puedes repetir varias veces este pranayama con un ritmo más rápido o lento, según tu experiencia. Al principio, realiza rondas de 30 o 40 respiraciones y ve aumentando progresivamente el número.
Tips para mejorar la digestión y reducir la hinchazón con el yoga
Además de practicar las posturas y la respiración mencionadas, para mejorar la digestión y reducir la hinchazón con el yoga, hay una serie de aspectos que debes tener en cuenta. Toma nota de estos tips:
- Practica regularmente el yoga para la digestión: no obtendremos ningún beneficio haciendo esta práctica solo en momentos concretos en los que nos sintamos hinchadas. "Se trata de practicar yoga regularmente para mejorar tu sistema digestivo en general", apunta Xuan Lan.
- No hagas el yoga para la digestión después de comer: según Xuan Lan, lo ideal es practicarlo en ayunas por las mañanas, después de la meditación. Si no es posible, hazlo unas dos o tres horas después de haber comido.
- Combina el yoga con una dieta equilibrada: esta favorecerá la absorción de nutrientes, mantendrá un microbioma intestinal sano y fomentará una eliminación eficaz de los residuos.