ACTUALIDAD ECONÓMICA
Jornada laboral

Díaz prepara la firma inminente del pacto con CCOO y UGT pese al choque con Economía: ultiman un plan para la transición de todas las empresas a las 37,5 horas

Trabajo prevé hacer la foto con los sindicatos este mismo viernes y Sumar acusa a Carlos Cuerpo de ser "la voz de una patronal en rebeldía"

La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.EFE
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Yolanda Díaz sigue adelante con la medida con la que aspira a pasar a la historia de las relaciones laborales en España: la reducción de la jornada a 37,5 horas semanales. Pese al conflicto abierto con el Ministerio de Economía, que apuesta por facilitar la adaptación del tejido empresarial al nuevo modelo, especialmente de los pequeños negocios, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo tiene prácticamente listo el texto que pretende firmar de manera inminente con los sindicatos.

Fuentes directamente involucradas en las negociaciones revelan a EL MUNDO que el Ministerio de Trabajo tiene la intención de sellar el acuerdo este mismo viernes con una foto de Díaz con los primeros espadas de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez. El documento que define cómo va a ser la nueva jornada laboral legal está muy avanzado, pero no cerrado, según estas mismas fuentes.

El problema no es tanto el cómo sino el cuándo. Ahí reside el principal punto de fricción entre Yolanda Díaz y Carlos Cuerpo. La vicepresidenta apuesta por una entrada en vigor inmediata de la jornada de 37 horas y media, al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Pero el ministro de Economía defiende la necesidad de establecer un régimen transitorio para respetar los convenios colectivos vigentes.

Las fuentes consultadas avanzan a este medio que, finalmente, en el texto legal "figurará una transitoria de convenios". Incluso los sindicatos admiten que los convenios colectivos "son Ley, están pactados entre empresarios y representantes de los trabajadores y están en vigor", tal y como defiende la patronal. Sin embargo, descartan un retraso generalizado de la jornada de 37,5 horas hasta la finalización de todos los convenios vigentes.

En el flanco sindical explican que tampoco tendría sentido "eliminar de golpe todas las horas que sobran el 1 de enero de 2029 en un convenio cuya vigencia finalice el 31 de diciembre de 2028". Y ponen más ejemplos para justificar las diferentes casuísticas que se dan actualmente en el ámbito de la negociación colectiva: "¿Qué pasa con los convenios que están en ultraactividad, con aquellos que llevan varios años sin negociarse?". "¿Vamos a empezar a aplicar también esa cláusula de 'acabar con los convenios vigentes' para la entrada en vigor del salario mínimo?", se preguntan.

Disposición transitoria

Ante este escenario, las partes están ultimando la letra pequeña de una disposición transitoria para los convenios colectivos vigentes, pero partiendo de la base de que la jornada media pactada en la mayoría de ellos ya está en el entorno de las 38,3 horas. "Estamos hablando de reducir una hora a la semana de media, no creo que eso provoque un caos en las empresas", sostiene un representante sindical que se sienta a negociar en la mesa con Yolanda Díaz. Ese es precisamente el argumento del Ministerio de Trabajo para defender la entrada en vigor inmediata de la norma.

Además de la transitoriedad, en ese plan de adaptación se está contemplando, por ejemplo, que las empresas que en la actualidad tengan convenios de 40 horas semanales puedan adaptarse a la nueva jornada con un plan negociado entre empresarios y trabajadores que puede incluir desde compensaciones de horas a través de la distribución irregular de la jornada, ampliación de vacaciones o paros parciales de la actividad, hasta el refuerzo de plantillas.

Más allá de la entrada en vigor o del régimen de transitoriedad para la aplicación efectiva de la nueva jornada laboral legal en todas las empresas del país, el otro punto de conflicto entre Trabajo y Economía está en los contratos a tiempo parcial. Yolanda Díaz pretende que el recorte del horario no se traduzca en una baja de sueldo. Sin embargo, Carlos Cuerpo ve un problema en ese aumento salarial implícito con el que tendrían que cargar las empresas, manteniendo los salarios en un contexto de menos horas trabajadas.

Ayudas a las pymes

"Hay que cumplir el acuerdo de Gobierno: reducción de jornada en 2025", afirmaba anoche la vicepresidenta Díaz en su cuenta de X, después de escuchar al ministro Cuerpo en una entrevista en TVE en la que evitó entrar al choque, admitiendo que la reducción de la jornada laboral "es un objetivo compartido", pero advirtió que la casuística de las empresas "es muy diversa" y "muy heterogénea". "No es lo mismo la situación de las pymes frente a las grandes empresas o la capacidad de adaptación que puedan tener, igual que los sectores también son muy diversos y muy heterogéneos entre sí", recalcó.

En este sentido, el titular de Economía defendió que para conseguir este derecho "de la forma más efectiva" se debe "acompañar a las empresas". "Tenemos que acompañarlas. Lo que hemos visto en la evidencia empírica, en experiencias que han funcionado, como por ejemplo la francesa, es que hay un acompañamiento de las empresas. Y ese elemento tiene que estar también en la solución", indicó.

Ahí estaría precisamente el último punto de conflicto. En un momento de las negociaciones, Díaz llegó a ofrecer un plan de ayudas a las pymes para intentar atraer a los empresarios, pero una vez que la CEOE se levantó de la mesa, retiró las subvenciones prometidas. Ahora, según explican fuentes de las negociaciones, la vicepresidenta estaría dispuesta a recuperar esas ayudas, no sólo porque lo pida Carlos Cuerpo, sino porque es consciente de que va a ser una baza necesaria en la negociación parlamentaria, especialmente para convencer a Junts.

Voz de una patronal en rebeldía

Sumar ha dejado en evidencia el enfrentamiento que hay entre los dos sectores del Gobierno, con una tensión que según avanza la semana está yendo a más, después de la reunión que celebraron ambas partes el pasado lunes. "Carlos Cuerpo no debería ser dentro del Gobierno la voz de una patronal en rebeldía", ha reprochado la secretaria de Comunicación de Sumar, Elizabeth Duval.

La dirigente de Sumar y persona muy próxima a Yolanda Díaz ha afeado al ministro de Economía su intento por dilatar la reducción de la jornada laboral y ha explicitado que con esa posición "se acerca más" a la petición de los empresarios que decían "que de ninguna manera".

En una intervención en La Sexta, Duval ha instado al PSOE a "cumplir" con el acuerdo de gobierno suscrito entre socialistas y Sumar que marca que en 2025 se tiene que aprobar la reducción de la jornada laboral a las 37,5 horas a la semana. Y se tiene que hacer, ha apostillado, de manera que también se beneficien los trabajadores temporales.

Duval ha criticado la actitud de los empresarios a la hora de negociar. Ha señalado que se les ha ofrecido ayudas y subvenciones para pymes o bonificaciones para la contratación, sin embargo, todas esas ayudas y otras más "han caído en saco roto".