Carmine Gallo, un conocido investigador italiano retirado, ha muerto este domingo con 66 años mientras se encontraba bajo arresto domiciliario, imputado como cabeza de una trama que accedía ilegalmente a los bancos de datos del Estado.
El ex agente ha muerto en su casa de Garbagnate Milanese (al norte de Italia), donde estaba en arresto domiciliario desde el pasado octubre, por un infarto, aunque se ha dispuesto la autopsia de su cadáver para determinar las causas, informan medios locales.
En el pasado, el conocido como 'superpolicía' Gallo había obtenido gran notoriedad en Italia por indagar crímenes como el asesinato del empresario Maurizio Gucci en 1995, incriminando a la esposa de este, Patrizia Reggiani, aunque actualmente estaba retirado desde 2018.
Sin embargo, la Fiscalía de Milán le involucró el pasado octubre en una supuesta trama de personas y empresas que entraban ilegalmente en los bancos de datos públicositalianos para obtener información de ex ponentes del mundo político, empresarial o del espectáculo.
Su objetivo, según los fiscales, era vender estas informaciones y, por ello, ordenaron el arresto de cuatro personas, entre estos Gallo, imputado desde entonces por los delitos de asociación criminal y acceso ilegal a los sistemas informáticos del Estado. El fiscal Francesco Tommasi explicó entonces que esta trama era "peligrosísima" porque "con la circulación indiscriminada de noticias e informaciones sensibles, reservadas y secretas" podían "tener en su mano a ciudadanos e instituciones" del país.
La base de esta presunta "organización" era la agencia privada Equalize y sus dos dueños, Gallo y el presidente de la Feria de Milán, Enrico Pazzali, así como el pirata informático Samuele Calamucci, todos imputados, mientras que figuran 60 investigados.
Los fiscales temen que los datos robados hayan acabado en manos de servicios de inteligencia extranjeros o de mafias y, de hecho, el fiscal nacional antimafia, Giovanni Melillo, está al corriente de las pesquisas y tachó el caso de "extremadamente alarmante".
De las interceptaciones filtradas se entiende que el grupo poseía 800.000 informes robados al banco de datos del Ministerio del Interior (SDI) por 'hackers' dirigidos presuntamente por Calamucci.
Entre los "espiados" constan el presidente del Senado, Ignazio La Russa, segundo cargo del Estado, o el ex primer ministro Matteo Renzi, y de las escuchas se deduce que llegaron a interceptar un correo para el presidente de la República, Sergio Mattarella.En diez días, el próximo 19 de marzo, el Tribunal de Milán debía determinar si mandaba a Gallo a prisión preventiva a la espera de juicio y revocaba su arresto domiciliario, como solicitaba la Fiscalía, según las mismas fuentes.